Reflexiones antiimperialistas sobre Cuba

Desde el pasado domingo, Cuba, las protestas que se han generado en la isla y la gestión del gobierno cubano, se están convirtiendo en el centro del debate entre diversos sectores de la izquierda. Sin querer ser muy exhaustivo, desarrollo algunas ideas para sostener la crítica que desde sectores antiimperialistas y solidarios con la Cuba socialista estamos realizando acerca de la existencia de una estrategia sostenida y financiada desde fuera de Cuba, para derrocar a su gobierno y hacer virar la política del país 180º.

1) Para comenzar, el hecho de que sostengamos que existe una estrategia injerencista extranjera en las protestas en Cuba no supone negar la existencia de limitaciones del proyecto socialista cubano, de legítimas protestas ciudadanas o de una situación de hartazgo de ciertos sectores populares, fundamentalmente jóvenes, cansadas de la situación socio-económica del país y que quieren una mejora de la misma, incluso una profundización en la revolución socialista. Estos problemas y contradicciones, derivados de los difíciles meses que se viven desde la pandemia, sumado a la cruda situación que vive la isla con el bloqueo yanquee, han sido asumidos por el propio gobierno y medios de comunicación cubanos, no sólo durante la pandemia, sino desde hace años en procesos participativos de transformación del país.

2) La postura antiimperialista, no obstante, supone comprender y poner en su justo lugar dichas limitaciones y protestas, y entender de qué manera están siendo potenciadas, temporalizadas e instrumentalizadas por el imperialismo, sus intereses, así como sectores de la oposición cubana (de dentro y fuera de la Isla) mantenidas, mimadas y afines a potencias extranjeras, fundamentalmente EEUU, pero también países europeos. Supone comprender a nivel histórico cómo se ha gestado la oposición cubana y cómo se ha desarrollado Cuba como país socialista contra viento y marea en medio de un criminal bloqueo y de incontables intentonas de aplastar la revolución.

3) En concreto, en torno al debate sobre la legitimidad de las protestas de estos últimos días en Cuba, debemos advertir que éstas se encuentran dominadas y hegemonizadas por grupos de oposición que quieren restaurar el capitalismo en la isla y que poseen su hoja de ruta. Estos grupos de oposición se han expresado en forma de llamamientos, simbología, tweets y lemas en las manifestaciones, con cánticos llamando a la intervención extranjera o portando banderas de EEUU. Esto no quiere decir que todos los sectores del pueblo cubano que han salido o criticado la gestión del gobierno de las protestas apoyen una intervención extranjera, o que formen parte activa de dicha oposición, pero sí que son utilizados por los sectores dominantes de la oposición que así lo quiere. Es innegable la presencia de descarados discursos anticomunistas, capitalistas y pro-intervencianistas, antes y durante el desarrollo de las protestas en líderes de la oposición, como Rosa María Payá (sí, la hija de Oswaldo) (1), José Daniel Ferrer García (el considerado sucesor de Oswaldo Payá en el liderazgo de la oposición cubana) (2), Orlando Gutiérrez Boronat (opositor residente en Miami y con fuertes vínculos con la oposición interna de la isla) (3), o como los del mismo Yotuel, el miembro del Movimiento de San Isidro, ex-Orishas, que inició el hashtag #SOSCuba el 10 de julio (1 día antes de las protestas) y que lanzó la canción-campaña “Patria y Vida” en febrero de este año (4). La lista sería interminable: Jorge Luis García Pérez ‘Antúnez’, Félix Llerena (5)… Todos ellos con incontables vínculos con ONGs, movimientos de “sociedad civil” cubana, partidos políticos opositores, que se están expresando en estas protestas.

4) Es por esto que las protestas cubanas se encuentran totalmente deslegitimadas a nivel internacional a ojos de cualquier mirada progresista y antiimperialista al situarse como expresión y caballo de Troya de la oposición cubana que pretende atentar contra la soberanía cubana a través del apoyo de las grandes potencias mundiales para materializar su proyecto político en la isla. Frente a ciertos discursos de la izquierda crítica con el gobierno cubano de querer dividir entre una oposición de Miami, furibunda, reaccionaria e intervencionista, y una oposición interna, que quiere ahondar en la revolución y que se habría expresado en estas manifestaciones, lo cierto es que esa división se desvanece en cuanto conocemos los vínculos entre las organizaciones de la oposición interna y externa, como puede verse en las remesas de dinero que entra de Miami para sostener los grupos opositores internos (una buena muestra sería la oposición interna del Comité de Integración Racial, que se ha denunciado que recibió ayuda financiera de EEUU) (6). Así, lo que vemos es realmente una oposición dentro y fuera de la isla, no monolítica ni homogénea, pero que se encuentra dominada y hegemonizada por una serie de referentes culturales y liderazgos con un ADN político e ideológico compartido muy concreto. Se trata de una oposición capitalista y pro-imperialista, ideológicamente afin a las derechas más reaccionarias de todo el mundo, desde Bolsonaro, el uribismo colombiano (7), los sectores republicanos de EEUU o el PP y Vox en España (8), y con un oscuro pasado terrorista en la Isla y en toda latinoamérica (9). Una oposición cuyas caras más conocidas y líderes viven normalmente fuera del país, y a la que poco importa cómo viva o deje de vivir el pueblo cubano, ni su situación bajo el modelo capitalista y neocolonial que pretenden implantar. Es precisamente esta oposición, la que llama a la intervención “humanitaria” extranjera (ver enlaces anteriores), a aumentar la presión de los países vecinos sobre el gobierno cubano, la que calla sobre el bloqueo criminal que EEUU, en contra de la voluntad de la mayoría de países del mundo, mantiene sobre la isla caribeña y que Trump profundizó; y la que utiliza la crisis del covid para sembrar la discordia y el odio dentro del país, ocultando que la gestión de Cuba ha sido ejemplar en su situación y en su contexto. Y para ello han hecho todo lo que se estipula en los manuales de la guerra híbrida: la deslegitimación del gobierno y sistema cubano, reproduciendo hasta el extremo el concepto de “dictadura”, o magnificando la “represión policial” de dicha “dictadura”, que ruborizaría a sus amigos “demócratas” de Colombia, Brasil, Bolivia, EEUU o la misma España a la hora de reprimir movimientos opositores; la desestabilización a través de la manipulación mediática y de redes sociales con cientos de bots y cuentas falsas (10), la falsificación de imágenes y hacer virales ciertos lemas o personajes pre-fabricados; la utilización de problemas reales parciales para generar crispación, odio y caos; y la llamada a realizar intervenciones humanitarias que terminan en invasiones militares como hemos visto en los casos de Libia, Siria o el intento en Venezuela.

5) En un reciente artículo de Ignacio Ramonet informaba que Cuba enfrenta una agenda de desestabilización orquestada desde fuera del país (11). Podemos completar esta idea ofreciendo algunos datos que dan muestra de la magnitud de la estrategia desarrollada por esta oposición hegemónica. Comenzaremos diciendo que esta oposición cubana dominante está totalmente mantenida y financiada por el Proyecto Cuba de la Agencia de los EEUU para el desarrollo (USAID). Millones de dólares son ofrecidos cada año en materia de ayuda a ONGs, programas de formación, ayuda al desarrollo, etc. a la oposición cubana. La web http://cubamoneyproject.com ofrece información detallada (aunque incompleta) de este enorme movimiento. Entre el 2017 y el 2020, la USAID invirtió en Cuba, es decir, en su oposición, 50 millones de dólares (12).

6) A través de esta financiación, se han planificado y orquestado campañas, se han mantenido económicamente a movimientos opositores, se ha permitido la difusión y propaganda anti-socialista en la Isla a través de medios como Cubanet o Radio Televisión Martí, se han erigido movimientos políticos para derrocar al gobierno de Cuba, mientras se apoyaba a los sectores más reaccionarios de la administración de EEUU para mantener y endurecer el bloqueo, motivando la crispación popular y el sufrimiento del pueblo cubano que permitiera el surgimiento de explosiones populares como la de estos días. La financiación desde la USAID de proyectos como “Cuba Decide” (13), que potencia en 2019 proyectos como “Pasos de Cambio” o el “Acuerdo para la Democracia en Cuba” unificando a prácticamente toda la oposición cubana dentro y fuera de la isla (14), ha permitido no sólo tener repercusión en la Eurocámara (con la resolución del 9 de junio), sino que orquestó para el 2021 una primavera caliente para ir sentando las bases de la construcción de una Cuba “democrática” (y capitalista) (15). No es casualidad que la canción “Patria y Vida” de miembros del Movimiento San Isidro, entre ellos el pro-injerentista Yotuel, surgiera en febrero de 2021 y que a las pocas semanas se fundara por la oposición el Plan de Rescate de la República de Cuba (16) o el Consejo de Transición Democrática de Cuba (17). Mayo del 2022 está en el horizonte de la oposición como fecha en que conmemorar el 120 aniversario de la proclamación de la república de Cuba, con un cambio político en la isla (18).

7) La oposición bien engrasada por apoyo y dinero extranjero están deseosos de que la desestabilización del país se recrudezca, para poder plantearse como legítima alternativa al gobierno cubano, como hicieran en Venezuela con Juan Guaidó; y realizar una intervención “humanitaria” que ingrese al país de nuevo en la negra senda capitalista y dependiente del imperialismo. Que esto no ocurra es responsabilidad del pueblo cubano, que no debe dejar que unas reclamaciones que puedan ser legítimas sean instrumentalizadas, dirigidas y orquestadas por dicha oposición, y que debe entender que el único camino es profundizar la revolución socialista, junto con su gobierno y modelo social, más allá del dogma de la democracia liberal capitalista. Pero también es responsabilidad del apoyo antiimperialista que brindemos desde todos los pueblos del mundo a la Cuba socialista y a los sectores de su pueblo patriótico, denunciando y aislando los discursos de la oposición que nos quieren vender como otra revolución de colores, ahora en Cuba, lo que es realmente una estrategia para acabar con la Cuba nacida de la revolución de 1959.

Sergio Almisas

(1) https://www.cibercuba.com/noticias/2020-07-10-u1-e196568-s27061-cubana-rosa-maria-paya-le-hablo-trump-encuentro-miami

(2) Aquí, un artículo escrito por él https://www.abc.es/internacional/abci-opinion-jose-daniel-ferrer-garcia-diaz-canel-acaba-tiempo-202106071252_noticia.html

(3) https://www.cibercuba.com/noticias/2021-06-20-u199482-e199482-s27061-opositores-denuncian-miami-crimenes-lesa-humanidad

(4) https://www.youtube.com/watch?v=phewkF3OgtQ y

(5) https://www.radiotelevisionmarti.com/a/cuba-expulsan-universidad-felix-llerena/144507.html

(6) https://www.afrocubaweb.com/cir.htm

(7) https://www.youtube.com/watch?v=5yiqN21dugk

(8) https://www.youtube.com/watch?v=iNmBFkILils

(9) https://www.telesurtv.net/bloggers/Quien-es-Rosa-Maria-Paya-y-su-secreto-para-viajar-gratis-en-avion-20170615-0004.html

(10) http://www.cubadebate.cu/noticias/2021/07/12/investigacion-confirma-la-perversa-operacion-de-redes-sociales-contra-cuba-lanzada-desde-el-exterior/

(11) https://www.prensa-latina.cu/index.php?o=rn&id=462075

(12) https://www.youtube.com/watch?v=qsfpQSEqPTk

(13) https://www.telesurtv.net/bloggers/Quien-es-Rosa-Maria-Paya-y-su-secreto-para-viajar-gratis-en-avion-20170615-0004.html

(14) https://www.cubanet.org/noticias/pasos-de-cambio-convoca-a-pensar-el-cambio-de-sistema-en-cuba/

(15) https://www.pasosdecambio.com/

(16) https://www.diariolasamericas.com/florida/levanta-vuelo-el-plan-rescate-la-republica-cuba-n4223862

(17) https://atalayar.com/content/creado-un-consejo-para-la-transici%C3%B3n-democr%C3%A1tica-en-cuba

(18) https://republicadecuba.org/20demayo

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